Recomendaciones generales

  • Si se da lactancia materna, seguir con ella.
  • La transición a los alimentos sólidos debe ser gradual.
  • A partir de los dos años no dar biberones de leche o zumo.
  • La alimentación cuanto más variada, más equilibrada.
  • El agua es la mejor bebida para saciar la sed.
  • Consejos:
    • Ofrecer los nuevos alimentos en muy pequeñas cantidades o mezclados con otros que le gusten; si los sigue rechazando espere un tiempo antes de volver a ofrecérselos y utilice otra forma de preparación.
    • Los niños y niñas son más receptivos a comer un nuevo alimento cuando observan que las personas que les cuidan los comen con gusto.
    • Emplear diferentes recetas. Por ejemplo el calabacín: en puré, tortilla de calabacín y patata, salteado o pochado con otras verduras y hortalizas, en pisto, relleno…
    • Presentar los platos de forma atractiva, en pequeñas raciones y a la temperatura adecuada.
  • Preste atención a sus señales de hambre o saciedad, respételas.
  • No utilizar los alimentos como premio o castigo, ni felicitarles si comen bien.
  • Evite alimentos sólidos que puedan suponer un riesgo de atragantamiento.
  • Establecer un horario regular de comidas y realizar alguna de ellas en familia.
  • Hay que darles alimentos cocinados en casa, productos frescos y de temporada.
  • No añada a los alimentos azúcar, miel o edulcorantes.
  • Evite la sal.
  • Para evitar accidentes emplear cubiertos y vajillas infantiles seguros.
  • Es importante incorporar la rutina del lavado de manos antes de las comidas y el cepillado de los dientes después.
  • Lea antes de comprar un alimento la información nutricional e ingredientes del etiquetado.
  • Estimular la práctica de actividad física diaria apropiada a su edad.

Recomendaciones específicas

  • Realizar 4 o 5 ingestas al día
  • El desayuno deberá incluir los siguientes grupos de alimentos
    • Lácteos
    • Cereales integrales
    • Frutas
  • Leche de vaca entera y/o derivados: deben consumir de 3 a 4 raciones diarias (500-700 cc). Una ración equivale a 125/150 ml de leche.
  • En el almuerzo y la merienda se aconseja darles pequeñas cantidades de alimentos.
  • Carnes: consumir de 2 a 3 veces a la semana. Mejor carne blanca (pollo, conejo, pavo) que roja (cerdo, cordero, ternera).
  • Pescados: consumir de 3 a 4 veces a la semana, variados (de 2 a 3 raciones de pescado blanco y 1 ración de pescado azul pequeño), libres de espinas.
  • Frutas: consumo de 3 a 4 piezas pequeñas al día (100 g por ración) de fruta fresca variada y de temporada.
  • Verduras y hortalizas: consumir de 2 a 3 raciones al día (100-150 g en crudo por ración), una de ellas sin cocinar (en ensalada).
  • Legumbres: consumo de 2 a 4 veces por semana.
  • Huevos: consumo de 3 a 4 huevos pequeños a la semana y nunca más de un huevo al día.
  • Pan, patata, arroz o pasta: consumo de 4 a 6 raciones al día de entre todos estos alimentos.
  • Consumo de aceite de oliva virgen extra para los aliños y para cocinar.
  • Es aconsejable que los segundos platos se acompañen de guarnición de acuerdo a la siguiente regla
    • Guarnición de ensalada, cuando el primer plato sea legumbre, arroz, o pasta.
    • Guarnición de hortalizas (pimientos, setas, champiñones, berenjena, espárragos, calabacín, cebolla…) cuando el primer plato sea verdura o sopa.