Ingredientes:
  • 1 taza pequeña de frutos secos: almendras, nueces o avellanas (40 g)
  • 2 cucharadas soperas de harina (30 g)
  • 2 vasos de leche desnatada o semidesnatada (400 g)
  • 2 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen (20 g)
  • Sal

* No apto para celíacos e intolerantes a la lactosa

Elaboración:

En una sartén se pone aceite y cuando esté caliente se añade la harina y se dora. Seguidamente se echa la leche fría poco a poco y se remueve para que no se formen grumos dejando cocer sin dejar de dar vueltas durante 10-15 minutos hasta que desaparezca el sabor a harina.

Finalmente añadir la sal y los frutos secos molidos, se dan vueltas durante unos minutos y se retira del fuego.

Utilizar para: solomillo, espinacas y otras verduras.

Nota: Los frutos secos tienen muchas calorías, aproximadamente unas 600 Kcal/100 g, pero a la vez contienen nutrientes imprescindibles para el organismo. Son ricos en potasio, fósforo, calcio y magnesio. Las grasas que poseen en mayor proporción son los ácidos grasos poliinsaturados, en concreto ácidos grasos esenciales, ácido linoleico y linolenico. Estos ácidos grasos son esenciales porque el organismo humano es incapaz de sintetizar y son vitales para la formación de las membranas celulares, particularmente de las células nerviosas.

Se aconseja consumirlos al natural, sin salar ni freír.

Tabla nutricional:
Energía Hidratos de carbono Lípidos Proteínas
672 Kcal 47,2 g 42,4 g 25,6 g