Se han inmunizado frente a la gripe 60.246 riojanos, de los que 41.000 son mayores de 65 años



La última tasa de incidencia recogida, de la segunda semana de enero, era de 87,4 casos por 100.000 habitantes, triplicando el indicador de la semana anterior

El consejero de Salud y Servicios Sociales, José Ignacio Nieto, acompañado por el director general de Salud Pública y Consumo, José Miguel Acitores, ha evaluado las coberturas alcanzadas tras finalizar la pasada Campaña de Vacunación Antigripal 2012-2013.

Con un total de 65.000 dosis de vacuna adquiridas, la Consejería de Salud y Servicios Sociales del Gobierno de La Rioja llevó a cabo el pasado otoño la Campaña de Vacunación Antigripal, desde el 16 de octubre al 30 de noviembre, con el objetivo de reducir la incidencia de la gripe estacional y las complicaciones derivadas de su padecimiento en la salud de los riojanos, mediante la vacunación de los grupos de personas de riesgo.

La Rioja se sitúa en los primeros puestos de las comunidades autónomas por cobertura de vacunación, según los datos del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad en relación con la pasada campaña contra la gripe, relativos al grupo de población de mayor riesgo (personas con edad igual o superior a 65 años) y en concreto, en La Rioja se alcanzó una cobertura de vacunación del 67,22%.

En términos absolutos se ha inmunizado contra el virus de la gripe a 60.246 riojanos, de los que casi 41.000 son mayores de 65 años.

El Gobierno riojano amplió hace seis años la vacunación universal a un nuevo colectivo. Se incluyó a todas las personas entre 60 y 64 años, con el objetivo de incrementar la protección frente a la gripe de un número mayor de riojanos. Salud ha alcanzado una cobertura del 27,3% en este grupo.

Durante la Campaña se aplicó una única vacuna para todos los colectivos. Salud utilizó la vacuna antigripal de virus fraccionados e inactivados.

Coberturas



En esta campaña de vacunación 2012-2013, la Consejería ha alcanzado los objetivos marcados para los diferentes tramos de edad y de esta forma la cobertura frente a la gripe en mayores de 65 años se aproxima al 70% y la ha mantenido en la población entre 60 y 64 años respecto a la campaña anterior así como la de los trabajadores sanitarios.

Y continúa aumentando la cobertura vacunal en personas menores de 60 años con alguna enfermedad crónica.

Situación epidemiológica



En plena temporada de circulación del virus de la gripe, y en la semana 2, que finalizó el 13 de enero, la tasa de incidencia, según el seguimiento que lleva a cabo la Red de Médicos Centinela de La Rioja,  se situaba en La Rioja en 87,4 (casos por 100.000 habitantes), triplicando la tasa de la semana anterior y superando por primera vez desde inicio de vigilancia su umbral basal, lo que parece indicar que la enfermedad estaría próxima a iniciar su periodo epidémico estacional.

En cuanto a la distribución por grupos de edad, se observa un aumento significativo de las tasas de incidencia de gripe en los menores de 15 años, una vez reanudada la actividad escolar después de las vacaciones de navidad. La incidencia es también creciente en el grupo de 15-64 años y estable en los mayores de 64.

La Gripe



Características de la gripe:

  • Es una infección vírica aguda que se transmite fácilmente de una persona a otra.
  • Los virus de la gripe circulan por todo el mundo y pueden afectar a cualquier persona de cualquier edad.
  • Causa epidemias anuales que en las regiones templadas alcanzan su auge durante el invierno.
  • Es un problema grave de salud pública que puede ser causa de enfermedad grave y muerte en poblaciones de alto riesgo.
  • Las epidemias pueden ejercer gran presión sobre los servicios de salud y tener importantes repercusiones económicas debido a la reducción de la productividad laboral.
  • La vacunación es la forma más eficaz de prevenir la infección.


La gripe estacional se caracteriza por el inicio súbito de fiebre alta, tos (generalmente seca), dolores musculares, articulares, de cabeza y garganta, intenso malestar y abundante secreción nasal. La fiebre y los demás síntomas suelen desaparecer en la mayoría de los casos en el plazo de una semana, sin necesidad de atención médica. No obstante, en personas con alto riesgo la gripe puede causar enfermedad grave, e incluso la muerte. El tiempo transcurrido entre la infección y la aparición de la enfermedad (el llamado periodo de incubación) es de aproximadamente 2 días.

Aparece generalmente en invierno y de una forma periódica, es decir, que cada año nos enfrentamos a una temporada en la que puede producirse una gran actividad y circulación del virus de la gripe (predominantemente en los meses de diciembre a febrero).

Las complicaciones de la gripe se presentan en todas las edades, sin embargo, son más frecuentes en personas con patologías crónicas subyacentes o de edad avanzada.

La prevención se basa en la vacunación y en la higiene.



La prevención de la gripe y de sus complicaciones se basa fundamentalmente en la vacunación, la medida más efectiva para reducir el impacto de esta enfermedad y de hecho mediante la vacunación de los grupos de riesgo se pueden evitar un 50-60% de hospitalizaciones y el 80% de los fallecimientos derivados de las complicaciones de la gripe.

Una vez finalizada la Campaña, la medida de prevención más importante es evitar el contagio a los demás. La gripe se transmite de persona a persona, a través de las secreciones respiratorias al hablar, al toser y al estornudar.

Las medidas de higiene más relevantes para la prevención son:



  • Lavarse las manos con frecuencia, sobre todo después de toser o estornudar.
  • Cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo al estornudar o toser y desecharlo inmediatamente después, o cubrirse con la parte superior del brazo, no con las manos.
  • No compartir vasos, cubiertos, toallas y otros objetos que hayan podido estar en contacto con saliva y secreciones.
  • Evitar lugares cerrados (trabajo, colegio, guardería o lugares públicos) para no contagiar a otras personas.


En caso de padecer gripe se recomienda:

  • Descansar.
  • Beber abundantes líquidos.
  • Evitar el consumo de tabaco o alcohol.
  • Tomar medicación que mejore los síntomas de la gripe (medicamentos para bajar la fiebre).
  • Los antibióticos no mejoran los síntomas ni aceleran la curación ya que no son efectivos frente a enfermedades producidas por virus.
  • No dar aspirina a niños ni adolescentes.
  • Utilizar los servicios sanitarios de forma racional: se aconseja acudir al médico de familia frente a los servicios de urgencia hospitalaria, si no es necesario.