Los productos falsificados pueden plantear una amenaza grave para la salud y la seguridad de los consumidores dado que, en su fabricación, no suele respetarse la normativa que les es de aplicación en materia de seguridad de los productos. Una mercancía falsificada ha podido ser producida utilizando materiales o sustancias de inferior calidad, inadecuadas y, en ocasiones, prohibidas por la normativa comunitaria dada su peligrosidad.
Cada vez es más habitual encontrarse con falsificaciones. A veces pensamos que la piratería sólo afecta a los derechos intelectuales (música, películas, libros, etc…) pero abarca mucho más que eso, incluye todo tipo de productos de consumo diario: textil, artículos y complementos deportivos, joyas, juguetes, cosméticos, medicamentos, etc….
El comercio de falsificaciones es un delito
La venta de un producto falsificado supone una grave infracción de los derechos exclusivos que una empresa tiene sobre su marca. El que pone a la venta un producto falsificado está, pues, cometiendo un delito.
Para el consumidor también tiene un costo negativo comprar productos que maliciosamente son vendidos como originales:
- No tienen calidad al no estar producidos según los estándares de calidad del ramo.
- Daños a la propiedad y a la salud.
- Encarece el precio final de la empresa que los produce legalmente.
Cómo identificar productos falsificados
A la persona que desconoce las características de un producto, le es difícil identificar si un producto es genuino o no. Hay que fijarse en algunas de estas cosas para distinguirlos:
- Empaquetado: Si las medidas de seguridad están violadas o no están presentes, lo mejor es no comprar el producto.
- Etiquetado: Revisar el etiquetado es esencial. Un truco muy utilizado es poner etiquetas similares a la original.
- Lugar de venta: Difícilmente se van a encontrar productos originales de marca que sean distribuidos fuera de las redes habituales del comercio.
- El precio: Si el precio es ridículamente bajo comparado con el precio habitual de mercado hay que alertarse.
- Marca: Leer detenidamente el nombre de la marca que se esté buscando. Algunas imitaciones llegan a ser tan parecidas al original que saltarse una sola letra puede suponer caer en el engaño.
Cómo reclamar en caso de haber comprado una entrada falsa o irregular
Adquiera siempre las entradas a través del canal indicado por el organizador y, en todo caso, en establecimientos habituales. En estos casos, la reclamación podrá interponerse contra el organizador y, según los casos, contra el vendedor.
En caso de haber comprado la entrada a un desconocido, hay que conservar la identidad del vendedor e interponer la correspondiente denuncia ante la comisaría de policía.
En todo caso, debe conservar la entrada original junto con el resguardo de pago, y ponerlo todo ello a disposición de la policía, juzgados y tribunales.