Las garrapatas son artrópodos arácnidos que se alimentan de sangre, generalmente de grandes animales. Muy frecuentes en nuestro entorno, se desarrollan especialmente en la montaña o en zonas rurales en las que habita ganado o animales silvestres. Normalmente la garrapata se encuentra entre la hierba esperando a que pasen animales o personas, con atuendos principalmente de colores claros, a las que anclarse. Algunos manuales indican que no se sienten atraídas por los colores oscuros, pero es más recomendable llevar ropa de colores claros para poder identificarlas y retirarlas antes de que se adhieran a la persona.

Estos ácaros, los de mayor tamaño que existen, son vectores de numerosas enfermedades infecciosas como el tifus y la enfermedad de Lyme.

Las picaduras de las garrapatas son un tanto particulares y entrañan algunos riesgos debido a que en ocasiones pasan desapercibidas y permiten que el arácnido permanezca adherido a la persona durante largo tiempo o se anclen en zonas del cuerpo que pasan más desapercibidas como puede ser el cuero cabelludo. Pero esto solo ocurre en contadas ocasiones ya que la picadura de la garrapata es algo frecuente y en la mayoría de los casos no presenta ninguna complicación, infección o enfermedad en la persona, tan solo un leve enrojecimiento de la zona.

Para reducir el riesgo de contagio, es importante deshacerse de la garrapata cuanto antes, ya que conforme más pase el tiempo se incrementa el riesgo de desarrollar enfermedades infecciosas. Sin embargo, lejos de lo que pueda parecer, deshacerte de estos insectos no es tan fácil, ya que las garrapatas cuentan con un sistema que les permite quedarse adheridas una vez efectuada la mordedura.

Qué debes hacer si te pica una garrapata

¿Cómo podemos evitar que nos pique una garrapata?

Lo más indicado para evitar las picaduras de las garrapatas es evitar las zonas en las que sabemos que podemos entrar en contacto directo con ellas, pero si no nos queda otro remedio hay que ponérselo difícil para que no nos piquen con los siguientes consejos.

• Llevar un atuendo adecuado. Pantalón largo, que se meta dentro de las botas o que cubramos con calcetines o polainas, y manga larga para evitar tener zonas de la piel expuestas.
• Usar colores claros porque, aunque se sienten atraídas por ellos van a favorecer su identificación y poder retirarlas más fácilmente que de la ropa oscura antes de que nos piquen.
• Revisar la ropa y el cuerpo tras una excursión a la montaña, zonas rurales o con ganado.
• NO usar repelentes ya que su efecto es fugaz, no es duradero y puede crear una falsa sensación de protección.

Si aun con todas estas precauciones nos pica una garrapata lo primero que hay que intentar es que no cunda el pánico. No todas las garrapatas transmiten enfermedades y, además, por lo general, las garrapatas necesitan estar adheridas a nuestro cuerpo un mínimo de 24 horas para traspasarnos las bacterias, virus o parásitos que pueden transmitir enfermedades como LYME. Esto suele ser poco frecuente y normalmente la picadura de una garrapata es algo inofensivo.

¿Cómo se deben extraer una garrapata?

Identificar la picadura de una garrapata es sencillo porque el animal se queda adherido a la piel durante varias horas. Es importante extraerla cuanto antes. Si con unas pinzas no nos es posible, hay que acudir al médico antes de llevar más de 24 horas con la garrapata incrustada.

Para lograr su extracción es conveniente seguir los siguientes consejos:

- NO se deben usar remedios caseros como utilizar aceites, vaselina o alcohol. No solo no suelen ser efectivos, sino que incluso pueden ser contraproducentes. Estos productos sirven para asfixiar al insecto, pero pueden acarrear consecuencias para el portador.

- NUNCA debemos retirarlas con las manos.

• EVITAR arrancarla de golpe para que los dientes retrógrados de la garrapata no se queden dentro de la piel originando infecciones.
• Para la extracción lo más adecuado es utilizar pinzas de borde romo que tenemos que introducir entre la piel y la garrapata en ángulo recto y mediante una tracción lenta pero continua, extraer la garrapata tomando la precaución de que salga todo el cuerpo. No hacer fuerza ni girar la pinza.
• Posteriormente a la picadura y la extracción de la garrapata NO hay que tomar antibióticos salvo en casos muy seleccionados y bajo prescripción médica antes de que se produzca una enfermedad.
• Prestar atención a los síntomas que puedan derivarse tras la picadura.

Ante cualquier duda o dificultad acuda a su médico para que se encargue de la extracción de la garrapata.