¿Qué puedo hacer si mi bebé llora mucho?

  • Ante todo, mantener la calma.
  • Asegurarse de que:
    • No tiene hambre.
    • No tiene frío.
    • No tiene fiebre.
    • Tiene el pañal seco. Lo normal es que moje varios pañales al día y no presente diarrea ni sangre en las heces.
    • No vomita en exceso
  • Alimentarle despacio, hacer pausas para que expulse los gases.
  • Si utiliza chupete, ofrecérselo.
  • Ponerle “piel con piel”.
  • Hablarle dulcemente, cantarle o ponerle “ruidos blancos” de fondo (una bañera llenándose de agua, un secador…).
  • Ponerle boca abajo, bien sujeto con una mano sobre su abdomen o colocarle en un portabebés o mochila.
  • Sacarle en su cochecito o en un portabebés.
  • Llamar a un familiar o amigo mientras se toma un respiro y descansa.
  • Si el bebé sigue sin calmarse, llevarlo a su pediatra.

RECUERDE: JAMÁS LO ZARANDEE

La cabeza del bebé es mucho más grande que su cuerpo, supone un 25% de su peso y la musculatura de su cuello es todavía muy débil para sujetar su cabeza. Al cogerlo, debemos apoyar su nuca en nuestra palma de la mano o entre el brazo y el antebrazo.

Si le zarandeamos, su cabeza se mueve bruscamente golpeando el cerebro contra el cráneo (ver dibujo). Esto provoca graves lesiones cerebrales, fracturas, asfixia, e incluso la muerte en un 10% de los casos.



Su nuca en nuestra palma de la mano



Su nuca entre el brazo y el antebrazo

Un bebé sano lo habitual es que llore desde las 2 semanas de vida hasta los 4-5 meses de edad. Este período de tiempo se conoce como “cólicos del lactante”. Si tiene entre 15 días y 6 meses de edad, lo más probable es que esté dentro del período del “llanto inconsolable”.

No es motivo para retirar la lactancia materna.

Y por supuesto, no significa que se sea mal cuidador.

Periodo de llanto inconsolable

El llanto inconsolable y prolongado es el motivo más frecuente para zarandear al bebé.

Es normal que este tipo de llanto produzca cansancio a quien le cuida. Lo importante es no responder violentamente zarandeándole.

Para calmarle, es preferible que lo haga una persona que se encuentre tranquila. Si no hay nadie más, deje al bebé boca arriba en su cuna y tome un respiro, vigilando que el bebé se encuentra bien.