Para pasar el verano con salud...

Ten en cuenta estas recomendaciones generales

Utilice crema de protección solar independientemente del tipo de piel y póngase ropa apropiada, ligera y de colores claros, evitando los tejidos sintéticos; gafas, gorras y viseras son las mejores opciones para protegerse del sol.

Favorecer una alimentación adecuada, especialmente aumentando el consumo de frutas y verduras, evitando las comidas copiosas y de digestión lenta, consumiendo los alimentos recién cocinados.

Beber agua sin esperar a tener a tener sed, teniendo precaución de no hacerlo de fuentes o abastecimientos no controlados sanitariamente. Evita el alcohol, bebidas energizantes y refrescos azucarados, consulta aquí alternativas saludables.

Procure conservar los alimentos en el frigorífico de acuerdo a las recomendaciones de conservación.

Evitar las actividades en el exterior durante las horas centrales del día. Si se practica ejercicio, que sea a primera hora o al atardecer y, sobre todo, refrescarse, hidratarse y llevar ropa adecuada.

Permanezca en las habitaciones más frescas, ventiladas o acondicionadas de la casa, y ventile el domicilio por la noche, cuando las temperaturas han descendido en el exterior.

Mantener la vivienda fresca, con el cierre de ventanas y persianas, toldos y cortinas bajadas sobre todo en aquellas zonas expuestas al sol para proteger la vivienda del calor.

Los lactantes, las mujeres embarazadas, las personas mayores, y las personas con enfermedades crónicas, son más sensibles al sol y al calor y por lo tanto deben extremar las medidas de protección. No deben quedarse en el interior de vehículos o coches estacionados.



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Cuídate del calor. Puede afectar a tu salud

Ten especial cuidado en las siguientes situaciones:

 

Mapa de temperaturas

¡presta atención a las alertas!

Conoce los síntomas de riesgo y cómo actuar:

Puedes sufrir “agotamiento por calor” si tienes:

  • Piel fría, pálida, húmeda
  • Fiebre menor de 40ºC
  • Pulso rápido y débil
  • Dolor de cabeza
  • Náuseas o vómitos
  • Mareo, cansancio y sudoración

Puedes sufrir “insolación” o “golpe de calor” si tienes:

  • Piel caliente y enrojecida
  • Fiebre mayor de 40ºC
  • Pulso rápido y fuerte, también la respiración.
  • Puede haber convulsiones, alucinaciones, irritabilidad o cambios del comportamiento
  • Puede haber alteración de conciencia y desmayo.

 

Lleva a la persona a un lugar fresco.

Ayuda a bajar la temperatura con paños fríos o un baño con agua fría

Disfruta del agua con seguridad

Elige zonas vigiladas para nadar, en playas y piscinas.

Conoce el significado de las Banderas de la playa y respétalo.

Las piscinas deben ser seguras y disponer de barreras, acotando el acceso.

Aprender a nadar con seguridad. Si te bañas en la playa evita zonas de corriente.

Evita bañarte de noche y no consumas alcohol u otras drogas.

Comprueba la profundidad, evita tirarte de cabeza.

Si no sabes nadar, utiliza el chaleco salvavidas dentro del agua o si juegas cerca.

Comprueba la profundidad, evita tirarte de cabeza.

Vigila niños/as a tu cargo. Avisa a tu madre, padre o persona adulta responsable, si vas a bañarte.

Si sientes malestar bañándote, sal del agua.



Puedes descargar las siguientes infografías para más información:



Decálogo para un baño seguro.

Consejos para disfrutar del agua con seguridad.

Para más información