Han contribuido en la rehabilitación de 350 pacientes con COVID-19 que han requerido, hasta la fecha, tratamientos de fisioterapia
En el Día Mundial de la Fisioterapia, que hoy se conmemora, el Gobierno de La Rioja, a través de la Consejería de Salud y Portavocía, quiere poner en valor la decisiva contribución de los fisioterapeutas para mantener la calidad de vida de la población.
En 2021, el lema se centra en el COVID Persistente y Fisioterapia, concretamente, en los beneficios de los tratamientos de fisioterapia para minimizar el riesgo de empeoramiento de los síntomas del COVID Persistente. Se ha puesto de relieve el importante papel que los fisioterapeutas han desarrollado y continúan desarrollando en la recuperación de las personas de todas las edades afectadas por los múltiples síntomas que caracterizan al COVID Persistente, que provoca altos niveles de discapacidad.
Desde el inicio de la pandemia, han atendido a 350 pacientes con COVID-19 que han supuesto alrededor de 6.500 sesiones de fisioterapia. El fisioterapeuta, gracias a diferentes técnicas, ayudar a minimizar síntomas como la fatiga o el malestar post esfuerzo, entre otros.
Los profesionales del área de Rehabilitación constataron que el tratamiento rehabilitador, a pesar de tratarse de una enfermedad respiratoria, se fundamenta en la recuperación motora, en la mejora de la capacidad muscular y en la readaptación a la actividad física. Por tanto, a las técnicas de fisioterapia respiratoria también se sumaron las de terapia motora.
En abril de 2020, el Hospital San Pedro puso en marcha el protocolo de actuación de rehabilitación en el paciente COVID-19. Desde la UMI se solicita la valoración de los pacientes graves que han iniciado el proceso de recuperación. Una vez corroborada la estabilidad hemodinámica del paciente para iniciar programa, el fisioterapeuta acude a proporcionar el tratamiento a la UMI, y cuando se produce el traslado a planta, el proceso de rehabilitación continúa sin interrupción.
Posteriormente, en el Hospital de La Rioja, de manera ambulatoria, se proporcionan tratamientos para disminuir la discapacidad, mejorando tanto la movilidad (por las retracciones articulares del encamamiento, la afectación de la fuerza y la polineuropatía del enfermo crítico), así como para mejorar la fuerza y la resistencia muscular, mejorar la mecánica y función ventilatoria y recuperar la capacidad funcional motora y respiratoria para conseguir una readaptación al esfuerzo.