El Sistema Público de Salud de La Rioja está desarrollando estos días un cribado de violencia de género en el ámbito sanitario con el objetivo de identificar posibles casos de maltrato en las mujeres que acuden a las consultas.
La campaña de esta III Semana del Cribado en Violencia de Género es de carácter intensivo y está dirigida a detectar casos de violencia de género en la pareja, una de las medidas contempladas dentro de la Estrategia de atención a la Violencia de género incluida en el Plan de Salud vigente. La campaña, que se desarrollará hasta el 28 de noviembre, ha incluido este año como principal novedad la edición de una guía que se entrega a las mujeres que están participando en el cribado.
Esta iniciativa centra su radio de acción tanto en los centros de Atención Primaria de La Rioja como en los servicios específicos hospitalarios. Para Paula Guerrero “debemos poner todos los recursos que estén en nuestras manos para ayudar a las mujeres que sufren este problema de salud y decirles que no están solas; que tienen al personal del ámbito sanitario y también al sistema público de salud de La Rioja a su lado para salir adelante”. Para ello, es preciso descubrir ese posible maltrato y el ámbito sanitario es el idóneo para poder localizar nuevos casos de violencia de género puesto que las mujeres ven en su profesional sanitario una persona próxima y de confianza.
Esta actuación, que coincide con la celebración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, se concreta en la elaboración de un test de cribado con preguntas específicas y directas que requieren poco tiempo al ser formuladas y que se están haciendo a todas las mujeres mayores de 14 años que acudan solas a las consultas.
Primero se pregunta sobre la relación de pareja y la resolución de las discusiones y si se considera que el cribado detecta que las respuestas indician que la relación no funciona bien, se pasa a hacer un cuestionario más amplio y específico.
Hay situaciones en las que no se lleva a cabo el test: cuando se trate de una mujer con patología que desaconseje la entrevista ese día (dolor, urgencia vital, trastorno cognitivo importante que dificulte la comprensión), si la mujer rechaza el cribado y si existe una barrera lingüística importante o por alguna causa profesional (en ese caso hay que especificar el porqué). A todas las mujeres, con independencia de si tienen relación de pareja masculina en el momento actual o dentro del último año, se les pregunta acerca de otras situaciones de Violencia de Género que hayan podido vivir a lo largo de su vida. Esto está permitiendo aflorar algunas situaciones de abuso sexual en la infancia y otras violencias de género a lo largo de la vida que han o están dañando la vida de la mujer porque desde el sistema sanitario se ofrece también ayuda para superar el trauma en estos casos.
Durante esta semana, el personal de referencia de los centros y servicios recogen las incidencias surgidas para evaluar y mejorar posibles actuaciones futuras. El personal sanitario y sociosanitario de Atención Primaria y de servicios específicos de Atención Hospitalaria han sido formados para llevar a cabo este cribado en violencia de género. Asimismo, se ha colocado cartelería para que las mujeres estén informadas cuando acudan a su centro o al servicio durante la semana.
Respecto a los principales datos de anteriores cribados, se constata el incremento de cuestionarios cumplimentados en la última edición, un 28,2% más que en la primera Semana de Cribado de 2018. Se detectaron 119 casos con alto grado de sospecha de VG, lo que supone un total de 3,6% de todas las mujeres a las que se hizo el cribado esa semana y tenían pareja o la habían tenido en el último año (supone un 2,5% de todas las mujeres a las que se hizo el cribado). Asimismo, se detectaron un total de 152 mujeres con maltrato confirmado, lo que supone un total de 4,6% de todas las mujeres a las que se hizo el cribado esa semana y tenían pareja o la habían tenido en el último año (supone un 3,2% de todas las mujeres a las que se hizo el cribado). Sumando ambos porcentajes, se obtiene una detección de un 8,2% de mujeres con maltrato o alto riesgo de tenerlo en su pareja. Esta cifra se acerca al porcentaje de 9,8% de mujeres riojanas que, según la macroencuesta de violencia contra la mujer del 2019, están sufriendo maltrato dentro de la pareja en el último año.
Todo ello pone de manifiesto la sensibilidad y especificidad del instrumento de cribado elegido por el sistema sanitario riojano para detectar precozmente la Violencia de Género.