Donar sangre salva vidas. Con cada donación de sangre se salvan tres vidas. Una sola donación, separada posteriormente en los hematíes, plasma y plaquetas, puede ayudar a mejorar la salud de varios pacientes. De ahí la importancia de contar con suficientes donantes quienes con su altruismo aseguran el buen funcionamiento de un hospital o sistema de salud.

Las transfusiones de sangre forman parte del día a día hospitalario, pero también hay que tener en cuenta que los hospitales han de estar preparados mínimamente para los primeros momentos de una tragedia que afecte a un gran número de personas como puede ser el accidente de un autobús o tren, la explosión de un edificio, un gran incendio, un terremoto… 

En el Banco de Sangre de La Rioja, ubicado en el Hospital Universitario San Pedro de Logroño, se lleva a cabo la extracción, conservación y distribución de la sangre y sus componentes. El Banco es responsable de proveer productos sanguíneos para la realización de los diferentes procedimientos médicos prescritos a los pacientes en los servicios asistenciales.

El centro funciona de lunes a viernes de 8 a 20 horas y los sábados de 9 a 14 horas. Además, dispone de una unidad móvil cuyas ubicaciones se mantienen actualizadas en el siguiente enlace www.bancosangrerioja.org donde también se pueden consultar el estado de las reservas.

Pueden donar sangre todas las personas mayores de edad y menores de 65 años que se encuentren bien de salud y pesen más de 50 kilos.

El procedimiento es muy sencillo. Los donantes de sangre deben acudir con su DNI. Primero deben completar un cuestionario, se les toma la tensión arterial y los niveles de hemoglobina. Después de la donación recibe un refrigerio acompañado de agua o un refresco con el fin de recuperar el volumen de sangre extraído.

Con cada donación de sangre se salvan tres vidas. Separada posteriormente en los hematíes, el plasma y las plaquetas, se puede ayudar a mejorar la salud de varios pacientes. La separación de la sangre en los diferentes componentes se realiza en la sala de fraccionamiento y se realiza mediante la técnica de centrifugación. Los componentes sanguíneos deben almacenarse en las condiciones y a la temperatura que especifica la normativa: los hematíes se deben mantener a temperatura de entre 2 a 6 grados por un periodo máximo de 42 días; las plaquetas se tienen que conservar a 22º durante un periodo de 5 a 7 días; y el plasma se almacena congelado durante un tiempo máximo de 3 años.

Donar es importante y también lo es estar apuntado en el banco de sangre por si existe una urgencia para que puedan convocarnos. El índice de donaciones explica el talante de una sociedad.